Los espíritus se dividen en 3 categorías: espíritus puros, espíritus buenos y espíritus imperfectos. Estas categorías determinan sus niveles de evolución, pero dentro de estas categorías hay matices entre mentes.
La siguiente escala espiritualista describe los rangos de pertenencia de los espíritus: el valor de los espíritus está disminuyendo.
Generalmente estas energías se usan para amarres de amor reales y rituales de prosperidad.
El mundo:
El mundo fue creado por Dios, se divide en dos partes: el mundo material visible y el mundo inmaterial invisible.
El mundo material no es esencial, solo se usa para la reencarnación de los espíritus en forma material. Solo el mundo invisible, el mundo espiritual, es necesario para la supervivencia de los espíritus.
El hombre:
El hombre está formado por tres elementos: el espíritu, el periespíritu y el cuerpo.
El cuerpo lo conecta a la existencia material, el espíritu lo conecta a la existencia espiritual, y el perisprit hace la conexión entre los dos, su función es transmitir información del cuerpo al espíritu.
La mente:
El espíritu es la base de nuestro ser, no el cuerpo, el cuerpo es solo una envoltura que usa el espíritu y que abandona cuando está demasiado dañado.
El alma es un espíritu encarnado, cuando el cuerpo ya no está vivo, regresa al mundo espiritual donde permanece como un espíritu errante antes de reencarnar, por lo que ha vivido varias vidas.
Nuestra alma está determinada por la calidad del espíritu que habita dentro de nosotros
No hay una sola categoría de espíritu, hay nueve tipos diferentes de espíritus (vea la escala de espíritus en la parte inferior de la página). No son iguales en nada, tanto en el dominio moral como en el del poder o en el del conocimiento. Están clasificados de acuerdo con una jerarquía precisa, sin embargo, tienen la posibilidad de evolucionar y progresar en estos rangos a través de la reencarnación material.
Ejercen una influencia indiscutible en nuestro mundo haciéndonos hacer el bien o el mal. Surgen espontáneamente o en la evocación, es posible que nos comuniquemos con ellos de manera tan visible con la ayuda de un vidente como con el ocultismo.
No están ahí para decirnos lo que debemos mantener en secreto ni para predecir el futuro. Los espíritus se comunican con nosotros para enviarnos la información de que hay una secuela de la muerte terrenal y que estamos tomando conciencia de nuestra espiritualidad.
Reencarnación:
El espíritu es el elemento principal de nuestro ser, el cuerpo es solo una envoltura de la que el espíritu se separa cuando llega la muerte.
Esta separación no causa ningún daño al espíritu, una vez desapegado de esta existencia material el espíritu vuelve a ser un espíritu errante hasta que habita en otro cuerpo. Por lo tanto, experimenta varias existencias a lo largo del tiempo.
Preceptos de vida druídicos
-Conocerte a ti mismo es bueno, controlarte a ti mismo es mejor.
-Es mediante el ejercicio que adquirirás el poder de la voluntad, mediante el ejercicio que lo mantendrás.
-No dejes que el miedo o la duda te paralicen, limitan y destruyen todo.
-Qué hacer, decidir; lo que hayas decidido, hazlo; lo que has emprendido, complétalo.
-Por dura y oscura que sea la tarea diaria, cuéntela con alegría.
-No frenes tu ascenso con lastre innecesario, compuesto de orgullo y suficiencia.
-Sepa cómo superar cualquier fatiga de su cuerpo, cualquier paso en falso de su mente, cualquier debilidad de su alma.
-Si no puedes modificar a los hombres y los acontecimientos a imagen de tus deseos, al menos no son ellos los que te modifican.
-Sea un punto de honor no tener sirvientes más que usted mismo.
-No haga que otros juzguen sus acciones.
-En cualquier circunstancia en que te encuentres, permanece como una isla en medio de las olas, como una montaña en medio de las nubes.
-Mantén la calma ante cualquier peligro.
-Nunca te fuerces: ten paciencia, mantén la alegría y la sonrisa, apunta a la armonía.
