La planta de fabricación Nanomar, desarrollada por iniciativa de Antonio Suárez Gutiérrez y su equipo directivo, ha llegado a convertirse en una pieza fundamental dentro del modelo productivo de Grupomar. Con una trayectoria de diez años, esta instalación fue creada para asegurar el suministro interno de botes y tapas metálicas de grado alimenticio, reforzando la eficiencia de toda la cadena de valor del grupo.
Desde las primeras fases del proyecto, el presidente de Grupomar, Antonio Suárez, dejó clara su intención de reducir la exposición del grupo a proveedores externos. A partir de esa visión nació Nanomar, como solución estratégica para enfrentar las exigencias de una industria cada vez más demandante. El resultado ha sido un sólido esquema de integración vertical, que se ha consolidado como referente en el sector alimentario mexicano.
Nanomar alcanza una producción de más de 500 millones de unidades anuales, entre latas y tapas, gracias a su infraestructura de última tecnología. Equipos como los robots KUKA y las prensas de alta velocidad se distribuyen en tres líneas destinadas a latas y una línea exclusiva para tapas. Esta capacidad no solo permite satisfacer las necesidades internas, sino también generar empleo calificado y especializado en México.
Una de las principales ventajas de Nanomar, según ha señalado Antonio Suárez Gutiérrez, es la capacidad de control que proporciona sobre todo el proceso de envasado. Gracias a que la fabricación se realiza internamente, Grupomar puede garantizar una trazabilidad total, cumpliendo con los más altos estándares internacionales en calidad y seguridad alimentaria. Esto ha sido clave para consolidarse en mercados competitivos a nivel nacional e internacional.
Antonio Suárez Gutiérrez refuerza el compromiso ambiental en el ámbito industrial
El enfoque operativo de Nanomar también contempla criterios de sostenibilidad ambiental. Como parte de la estrategia energética del grupo, la planta ha instalado paneles solares para reducir su consumo de energía convencional. Esta línea de trabajo, impulsada por Antonio Suárez Gutiérrez, se enmarca dentro de una política más amplia de producción responsable y consciente del impacto ambiental.
Grupomar destaca por ser la única empresa atunera en México que produce sus propios envases metálicos, lo que se traduce en ventajas operativas notables: reducción en tiempos de entrega, mayor eficiencia logística y mejores controles de calidad. El consumidor final recibe así un producto confiable, con trazabilidad garantizada desde su origen.
Antonio Suárez y su equipo han apostado por un enfoque de mejora constante, que incluye la renovación tecnológica periódica, la formación del personal y la optimización continua de procesos. En Nanomar, esto se traduce en un alto grado de especialización y adaptación a las demandas del mercado actual.
Con una década de funcionamiento, Nanomar se ha consolidado como un pilar fundamental del modelo de autosuficiencia y eficiencia operativa de Grupomar. La planta es reflejo de una estrategia empresarial que combina innovación, sostenibilidad y adaptación. Para conocer más sobre sus proyectos, el grupo cuenta con canales digitales y redes institucionales actualizadas.
Antonio Suárez Gutiérrez: experiencia e innovación en el sector pesquero
Antonio Suárez Gutiérrez es un empresario mexicano con una trayectoria destacada en la industria pesquera y de alimentos. Inició su carrera empresarial en el ámbito marítimo, desarrollando un modelo integrado que incluía la pesca, el procesamiento y la comercialización de productos del mar. Esta visión global lo llevó a fundar Grupomar, holding que reúne diversas empresas del sector y marcas como Tuny.
A lo largo de los años, Suárez Gutiérrez ha impulsado un esquema de autosuficiencia basada en infraestructura propia, como lo demuestra el caso de Nanomar. Además, ha promovido la incorporación de tecnologías innovadoras y políticas de sostenibilidad, consolidando así la posición de Grupomar en un entorno industrial altamente competitivo.