Si ya has intentado enseñar a tus hijos a leer, sabes bien que no es una tarea fácil. Las investigaciones muestran que los niños aprenden a leer cuando son capaces de identificar letras o combinaciones de letras y conectar esas letras con sonidos. Hay más, por supuesto, como dar significado a palabras y frases, pero la conciencia fonética (comprender los sonidos en las palabras habladas) y la comprensión de la fonética (saber que las letras impresas corresponden a los sonidos) son los primeros pasos básicos para que tu niño se convierta en un lector.
¿Cuáles son los pasos a seguir para enseñar a tus hijos a leer?
Paso 1: Comportamientos previos a la lectura: Existen actividades que no se parecen en nada a la lectura, pero asientan las bases para que un niño se convierta en un lector. Estos comportamientos previos a la lectura pueden aparecer espontáneamente a través de la propia observación y la ayuda de un adulto u otros niños, puede alentarlos a seguir.
Enfócate en lo siguiente:
- Conciencia de la impresión en carteles, etiquetas, envases, etc. Los niños pueden saber que un cartel dice “McDonald’s” antes de que realmente puedan leer las letras.
- Juegos de manipulación de sonido, piensa en Hannah Banana y otras palabras para darles conciencia de la rima.
- Conceptos sobre la letra impresa. ¿Sabe el niño en qué dirección se encuentra un libro? ¿Tiene la sensación de que las páginas se pasan de una en una y siempre en la misma dirección? Mientras le lees, señala las palabras para que pueda ver que están leyendo de izquierda a derecha.
Cuando un niño demuestra estos comportamientos y habilidades, puede estar listo para aprender a leer. Si no es así, incorpora estas actividades a tu rutina diaria para guiarlos en la dirección correcta. Continúa leyendo en voz alta al niño. Si los niños aprender que leer es una experiencia agradable, se sentirán motivados a hacerlo por sí mismos.
Paso 2: Aprender las letras: Obvio, ¿verdad? Pero es posible que te sorprendas al saber estas cosas sobre la introducción a las letras:
- No es necesario enseñar las letras en orden alfabético. Piénsalo, si le enseñas las letras a, m, t y s, el niño puede comenzar a leer algunas palabras simples de inmediato, y eso es muy emocionante para ellos. Las recompensas rapadas mantienen a los niños motivados.
- Dominar una sola letra implica dos habilidades diferentes: Identificar la letra visualmente y memorizar el sonido asociado con la letra.
- Usar los sentidos y el movimiento ayuda a los niños a memorizar letras. Construye la letra con arcilla, dibuja la letra con el dedo en la espalda del niño, asocia un movimiento con el sonido de la letra como saltar o mover la mano.
- Una sola exposición no es sufriente. Tiene que haber mucha memorización para aprender todas las letras y sonidos. Debes ser paciente.
Paso 3: Mezcla de sonidos: Las cartillas de lectura y los libros para aprender a leer son esenciales en este punto. Pasar de saber letras individuales a palabras se trata de combinar los sonidos. Prueba esta técnica:
- Usando una palabra de 2 o 3 letras, señala la letra y di en voz alta cada sonido. Luego vuelve al principio de la palabra. Desliza tu dedo lentamente debajo de las letras mientras estiras los sonidos y los juntas. Haz que el niño también lo intente.
Paso 4: Comienza a introducir palabras visuales: Las palabras a la vista suelen ser palabras más cortas que aparecen con mucha frecuencia en el texto y, a veces, no siguen reglas de ortografía predecibles. La práctica visual de palabras puede incluir tarjetas de memoria, buscar palabras en libros y usar juegos y aplicaciones para dispositivos móviles o computadoras.
Paso 5: Habilidades fonéticas: Aprender los sonidos de las letras individuales es solo una base. Lo siguiente es enseñarles las combinaciones de las letras. Hay muchos patrones y reglas fonéticas, pero esto te da mucho material con el que trabajar.
Paso 6: Aprender a dar sentido a las cosas: Dar sentido es una frase que siempre se usa en talleres de enseñanza y libros. Simplemente significa que a medida que un niño comienza a leer oraciones y textos más largos, debería poder sacar algo de significado. Deben tener una idea de lo que sucede en la historia o de lo que el autor quiere que sepan. La creación del significado debe incorporarse tan pronto como el niño comience a leer oraciones. Ayuda al niño con esto al:
- Hacerle preguntas sobre lo que acaba de leer.
- Animarlo a releer si no entendió lo que quiso decir el autor.
- Demostrarle tus propias reacciones al texto.
¿De qué sirve aprender a leer si no disfrutas de la historia, no aprendes algo nuevo o no estás expuesto a una forma diferente de ver las cosas?